El ex capitán de Inglaterra, Sir David Beckham, ha sido nombrado caballero por sus servicios al fútbol y a la sociedad británica.
El hombre de 50 años, que fue incluido en la lista de honores del cumpleaños del rey Carlos a principios de este año, fue nombrado caballero por el rey durante una ceremonia en Berkshire el martes.
«No podría estar más orgulloso», dijo Beckham. «La gente sabe lo patriota que soy; amo a mi país».
«Siempre he dicho lo importante que es la monarquía para mi familia.»
«Tengo la suerte de haber viajado por todo el mundo y todo el mundo quiere hablar conmigo sobre nuestra monarquía. Me llena de orgullo.»
Beckham estuvo acompañado en el Castillo de Windsor por su esposa Victoria y sus padres Sandra y David.
Victoria, quien recibió una OBE en 2017 por sus servicios a la industria de la moda, diseñó y confeccionó el traje que su esposo usó en el castillo.
«[El rey Carlos] quedó bastante impresionado con mi traje», dijo Beckham.
«Es el hombre que mejor viste que conozco, así que ha inspirado muchos de mis looks a lo largo de los años y sin duda inspiró este look.»
«Fue algo que me hizo mi esposa.»
«Vi fotos antiguas de él cuando era bastante joven, con chaqué, y pensé: ‘Vale, eso es lo que quiero ponerme’, así que se lo di a mi mujer y ella lo hizo.»
Beckham jugó 115 veces con su selección y fue capitán de los Tres Leones durante seis años, entre 2000 y 2006.
El excentrocampista del Manchester United y del Real Madrid participó en tres Mundiales con Inglaterra, así como en dos Eurocopas.
Beckham surgió de la cantera del United en 1992 y pasó 11 años en el primer equipo antes de unirse al Real Madrid en 2003 en un acuerdo por 25 millones de libras.
Jugó cuatro años en la capital española antes de unirse al LA Galaxy de la Major League Soccer. Durante su etapa en Los Ángeles, tuvo dos cesiones al AC Milan, antes de finalizar su carrera en el Paris Saint-Germain en 2013.
Pero la influencia de Beckham va mucho más allá del terreno de juego.
Nacido en el este de Londres, desempeñó un papel importante en la consecución de los Juegos Olímpicos de 2012 para Londres.
Ha trabajado con la organización de ayuda humanitaria Unicef desde 2005 y en 2015 se creó un fondo que lleva su nombre para conmemorar una década de colaboración entre ambas.