La lista de lesionados del PSG es interminable. Hakimi estará de baja entre 6 y 8 semanas, Dembélé se recupera de una lesión en la pantorrilla, Nuno Mendes ha sufrido otro revés y Désiré Doué no volverá hasta diciembre. Vitinha, Neves, Ruiz y Barcola están al límite de sus fuerzas.
Luis Enrique no tiene otra opción: está improvisando, reestructurando su defensa y dando oportunidades a los jóvenes.
Ahora mismo, el PSG está en modo supervivencia. Sin laterales, sin velocidad en las bandas, sin profundidad en la plantilla, este viaje a Lyon parece más una misión de comando que un partido de liga rutinario. El entrenador lo llama un “desafío”, pero en realidad se trata de mantenerse a flote hasta el parón invernal.
Mientras la plantilla se reduce cada vez más, el mercado de fichajes se calienta. Según Fichajes , el PSG está dispuesto a desembolsar 150 millones de euros por Victor Osimhen, la máquina de hacer goles del Galatasaray.
Osimhen, ahora la prioridad absoluta
Con 46 goles en 52 partidos, el nigeriano está rindiendo a un ritmo sobrehumano. El PSG quiere adelantarse al Barcelona y darle a Luis Enrique un auténtico goleador, alguien capaz de transformar por sí solo todo el ataque.
Y con la delantera desmoronándose físicamente, el “plan Osimhen” de repente deja de parecer un lujo… y se convierte en una emergencia disfrazada de ambición. Esto, a pesar de que Luis Enrique haya descartado repetidamente al delantero en el pasado.
Partido de alta tensión en Lyon, mercado de fichajes al rojo vivo entre bastidores: noviembre promete ser un mes intenso para el PSG. Y en enero, no solo podrían regresar jugadores, sino también la chequera.