Dos jóvenes han sido detenidos tras un altercado en el que se vieron involucradas unas 60 personas en el centro de la ciudad.
La policía del Gran Manchester (GMP) detuvo a un joven de 16 años bajo sospecha de alteración del orden público con agravante racial y a otro bajo sospecha de agresión tras los disturbios ocurridos el sábado en Bolton.
La policía de Greater Manchester (GMP) recibió poderes para dispersar a las personas del área hasta las 02:00 GMT del domingo.
Un portavoz afirmó que se había congregado «un gran grupo de jóvenes en el centro de la ciudad» y que existían informes de que «dentro del grupo se estaban produciendo agresiones».
El inspector Nick White, de la división de Bolton, dijo: «El comportamiento denunciado de los implicados, que puso en riesgo a los ciudadanos, no será tolerado.»
«Bolton debe ser un lugar seguro para todos aquellos que deseen visitarlo y hacer uso de las instalaciones del centro de la ciudad.»
